EL MUSEO DE CATALUÑA MÁS SENSUAL QUE ENCONTRARÁS JAMÁS.
Hay un momento en nuestra niñez en el cual, no sabemos muy bien por qué, pero se perturba nuestra inocente mente y empieza a ver cosas eróticas – que ni siquiera entendemos – donde no las hay. Mira a los pobres sacapuntas, el clásico chiste de “Mistetas” (que ya ha sido encontrado), o incluso lo que intuíamos que eran un cuerpo desnudo en la pantalla borrosa del teletexto.
Pero esto no se queda aquí, sino se va desarrollando con el tiempo y ya las formas fálicas las vemos en todo. Una muestra de ello es la vergüenza que nos da comernos en público un calipo o un plátano sin haberlo partido antes en pedazos. Porque pensamos que igual somos nosotros y nuestra “mente sucia”, pero no amigo, es algo muy común. Y sí, estas esculturas que estás viendo en este bosque-museo de Cataluña son por fin lo que parece que son. Parece que ya no hace falta mirar hacia Cuenca, porque Gerona tiene mucho que enseñar.

EN CASTELLANO POR FAVOR
Al norte de de Gerona, en Cataluña, hay un museo – o más bien un pedazo de bosque – que le quita toda la capacidad creativa a los malpensados. Y es que hay esculturas eróticas por todos lados. Y las que no lo son ya le sacarás tú la punta (guiño, guiño).

Este museo está ubicado al aire libre, en unos cuarenta mil metros cuadrados de bosque que ya de por sí es una obra de arte por las formas y colores de sus accidentes geográficos, caminos y riscos. Senderismo, cultura y erotismo, todo en uno, muy completito vaya. Hay más de 100 esculturas de lo más originales para descubrir, ya sean eróticas o no. Así que prepárate para flipar.
Nada más entrar ya te encuentras con un culo que te recibe muy alegremente. Así, de buenas a primeras. Esto acaba de empezar. No hay flechas a las que seguir, solamente a tu curiosidad.

EL NACHO VIDAL DE LA ESCULTURA
Xicu Cabanyes es el creador de este bosque. No, no lo plantó él, pero le dio otra vidilla. Era un tío de campo de toda la vida que tenía algo así como un don dándole forma a la madera con el cuchillo. Tanto era así que el muchacho ya iba provocando tallando esculturas eróticas en el franquismo. Varios años después tenía ya una colección tan grande que decidió comprarse un bosque (así, como si nada) para exponerlas todas allí. Y así surgió esta maravilla, no hay otro museo de esculturas eróticas al aire libre en España.
Xicu, que tiene su taller en el mismo bosque, se ha convertido en un referente cultural y artístico catalán. Y no es para menos. Siente que la mejor idea que ha tenido nunca es hacer el bosque de esculturas de Can Ginebreda.

OLVÍDATE DEL PORNO BARATO
La reflexión del artista sobre el erotismo es que muchas veces se ve ensuciado por la pornografía. Sin embargo, la curiosidad que mueve a ambos es la misma. Entiende que el erotismo es inevitable ya que las formas naturales cóncavas o erectas tienen una relación directa con el sexo, olvidándose de la supuesta moral conservadora algo represora que predomina en la sociedad actual.
En todas las esculturas de este museo de Cataluña se puede ver cómo el escultor juega con lo explícito desde el respeto más profundo, gran diferencia que lo separa del porno barato.


EVOLUCIÓN CONSTANTE
Cada cinco meses una nueva escultura se une a las demás, dándole un mayor dinamismo al bosque. Xicu Cabanyes lo define como una obra imposible de terminar ya que siempre hay algo más que añadir. Por eso ya ha nombrado a un heredero para su bosque erótico: su pueblo, Porqueres. Confiamos que llegado el momento se continúe con el legado. Porque aunque no sea gusto de todo el mundo (nunca llueve a gusto de todos), es indudable que Can Ginebreda es un lugar fascinante. Son los sueños de un hombre libre que necesitó un bosque para materializarlos. ¿Qué necesitarías tú? Esperemos que algo más modesto.

¿QUÉ NECESITO SABER?
- Para llegar pon esto en el GPS: Carr. de Mieres, km 25.5, 17834 Porqueres, Girona.
- Si quieres más info, echa un vistazo a su web.
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