EL MUSEO DE SAN FRANCISCO QUE TIENE MÁS LSD QUE TODO EL DEPARTAMENTO ANTIDROGA DE ESTADOS UNIDOS. TRIPIS PARA TODOS.
El LSD o tripi, para aquellos no introducidos en las drogas como nosotras, es un alucinógeno. Consiste en unas láminas a las que se les impregna un ácido semisintético. Estas hojas las perforas en miles de pastillitas, que te metes en la boca y te dan un viaje psicotrópico curioso. Hay veces que se les añade colores y decoración, no para que los colecciones sino para que sean más atractivos, no son listos ni nada. En fin, este breve prefacio era para comentarte que hay un tío que efectivamente ha coleccionado estas láminas decoradas y ha creado su propio museo en San Francisco.

en castellano por favor
The Blotter Barn o Instituto de Imágenes Ilegales es un peculiar museo en San Francisco. Ahora no recibe visitas, pero es digno de mención por lo alucinante del lugar y de su historia.
No hay ningún cartel, ni una taquilla, ni un horario determinado. Eso sí, has de tener una cita previa. Y es que no es un museo público, sino la colección que un tío hizo en su casa.

Tiene más de 33.000 hojas de LSD con diseños psicodélicos por todos lados. Los diseños son muy variados y en muchos de ellos parece que ya vas drogado, porque es que empana muchísimo. Especialmente aquellos que aparecen mil veces en la misma lámina. Claro, hay que pensar que ese diseño tenía que estar en cada una de las pastillas.
Es una forma de arte súper efímera. Cada pieza es única, con su propio estilo y sabor. Esto ayuda en parte a distinguir el origen y la época en la que se fabricó. Y si no tienes ni papa de ello no te preocupes, que para eso está Mark, para que le hagas millones de preguntas.

WHO THE FUCK IS THAT GUY?
Mark McCloud es el dueño de esta colección ilegal ubicada en su casa de San Francisco. Realmente con conocer a Mark ya ha merecido la pena la visita,
Este tipo nació en Detroit pero se crió en Buenos Aires. Probó los tripis por primera vez cuando tenía 13 años. Muy educativo todo… En 1971 se cayó por una ventana y cree firmemente que el haber estado drogado le salvó la vida. Cada uno se engaña como quiere y no estamos aquí para destrozar las ilusiones de la gente. En fin, que la hostia le sirvió para darse cuenta de que tenía que seguir coleccionando láminas de LSD.
Al principio los guardaba en el congelador, lo que era un problema porque me los comía continuamente. Pero entonces salió el ácido de Albert Hofmann, y entonces pensé, «joder, estoy enmarcando esto». Fue entonces cuando me di cuenta de que si intentaba tragarme esto me atragantaría con el marco.
Mark McCloud

QUE LA DETENGAN
Como intuirás, este museo de San Francisco ha intentado ser chapado varias veces. Hay que tener en cuenta que el LSD se prohibió en Estados Unidos en 1968, por lo que la casa de Mark ha sufrido mogollón de redadas policiales. Desde aquí proponemos que se extienda la expresión de “estar más agobiado que el abogado de Mark”.
El caso es que al estar las láminas expuestas al oxígeno y a los rayos ultravioletas del sol, los químicos han perdido sus efectos, por lo que ha conseguido librarse de la ley varias veces. Por los pelos Mark.

¿QUÉ NECESITO SABER?
- Sorry, este museo de San Francisco ahora está cerrado.
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